jueves, 17 de marzo de 2016

Sobre viajes, incertidumbres y tesoros.

¿Y si la riqueza está en el viaje a través de los mares y no en el cofre del tesoro de algún pirata?

 Nos obsesionamos con conseguir llegar al destino, con ganar el premio, con saber con certeza cuál será el final de la travesía sin darnos cuenta que siempre será incierto, nunca podremos saber que habrá mañana, que podremos encontrar más allá del desierto, quién nos acompañará la próxima jornada, si las personas que amamos se quedarán una vez cruzado el océano.

 La incertidumbre del viaje. Todas las posibilidades y un enorme vacío en el que cualquier cosa puede suceder. No hay viaje que se disfrute con la desconfianza, el miedo y la confusión como compañeros. “Pide que el camino sea largo, que muchas sean las mañanas de verano”, dice el poeta, no añade y que sea seguro y estable y medible y real y con muchas señales que aseguren el camino y por dónde estamos transitando.

Estar dispuesta a continuar cuando no hay premio, ni cofre de pirata que nos espere, continuar viaje sin esperar que las cosas cambien se mantengan o empiecen o terminen.
Continuar con la brújula marcando el presente, el único espacio navegable.
"Ítaca te brindo un hermoso viaje. Así, sabio como te has vuelto, lleno de experiencia entiendes ya, qué significan las Ítacas."



1 comentario:

  1. Muchas gracias Maite. Es muy bonito y como dice una gran amiga Itaca está en todos los sitios y en ninguno. Está donde tu quieras que esté.
    Gracias.

    ResponderEliminar